sábado, 29 de octubre de 2011

If you only walk long enough

—Minino de Cheshire, ¿podrías decirme, por favor, qué camino debo seguir para salir de aquí?
—Esto depende en gran parte del sitio al que quieras llegar —dijo el Gato.
—No me importa mucho el sitio... —dijo Alicia.
—Entonces tampoco importa mucho el camino que tomes —dijo el Gato.
—... siempre que llegue a alguna parte —añadió Alicia como explicación.
—¡Oh, siempre llegarás a alguna parte, —aseguró el Gato— si caminas lo suficiente!

miércoles, 28 de septiembre de 2011

Por una hoja de papel

Es increíble que por una hoja de papel no se permita seguir estudiando.
No, mejor dicho, que por una maestra no te puedan entregar el papel que necesitas para seguir estudiando. Y para colmo ¡es una materia tan inútil por la que me están negando mi certificado de secundaria!
La materia obligatoria pero opcional que imponen al menos aquí en México, no sé si en otros países tengan que estudiar un "taller". Yo elegí la materia que se veía más fácil de tres: Corte y Confección. Las otras eran Taquimecanografía (no sé si se escribe así) y Dibujo Técnico.
El primer año fue fácil, la maestra era ya vieja, a decir verdad, y sólo hacíamos bordados en un retazo de tela y algunos trazos. En segundo y tercero nos cambiaron la maestra, a una que me dio clases de Historia Estatal en primer año, y nos puso a hacer trazos de blusas, faldas y también los hicimos en tela. Para ser sincera, no es tan fácil como parece, pero tampoco se me hacía imposible. Un par de veces la maestra me ponía al frente y decía "Miren lo bien que le quedó la falda que hizo en tal tiempo y ustedes que llevan todo el bimestre siguen con el trazo". No me quejaba, pero sentía pena porque me usara para presionar a las demás, aunque hayan sido sólo dos o tres veces.

Blablablá, de verdad no quiero hablar de algo tan aburrido, pero intento desahogar de alguna forma un poco de la frustración y el miedo que siento justo en este momento, porque en unos minutos iré a la secundaria en la que estudié para ver si la maestra al fin se dignó a darme aunque sea un 6 de calificación para que me den el certificado que necesito, porque si hoy mismo no lo entregó me sacan de la preparatoria... si no está esa hoja de papel lista ya, espero que me den al menos una constancia de que está en proceso y (espero que...) en unos días estará lista. También ruego a Alá, Bob Esponja, Homero Simpson, Aslan, Dios, Albus Dumbledore y Hayley Williams que si me dan una constancia, las secretarias de la preparatoria la acepten y me esperen unos días más.

Tengo un hueco en el estómago del tamaño de Garfield. Me siento demasiado asustada... ¡Y todo por una jodida hoja de papel!

viernes, 23 de septiembre de 2011

About the fanfics...

¡Hola!
Pues, ¿por dónde comenzar? Existe un fanfic en mi cuenta de Potterfics que me causa dolores de cabeza, y me sorprende de sobremanera el que ese fic sea el de Carlie. No me importa mucho el haber perdido a tantas lectoras, pero me siento mal por haber hecho la estupidez tan grande que fue borrar mi cuenta. Lo que me está jodiendo, para ser sinceros, es que después de tanto tiempo sin laptop, haciendo pequeños one-shots, desechándolos, re-haciéndolos "con mejor calidad" y demás cosas, hasta me he olvidado de mucho que iba a poner en la historia. Recuerdo cosas, claro, pero me olvidé de lo importante, las razones. ¿Cómo hacer que un ejercito de neófitos intente atacar a la gran realeza de los vampiros si me olvidé de quién era el que los lideraba? Y no, no es ni Vladimir ni Stefan, los vampiros rumanos de "Amanecer". Y sí, el spoiler fue intencional para dar una idea de lo perdida que estoy. Aunque Vladimir y Stefan son tentadores, son demasiado inteligentes para saber que un montón de neófitos nunca podrían ganar una batalla a los Vulturi.
Muchas veces me he sentido incapaz de continuar ya, y hasta ganas me dan de borrar el fic y olvidarme por completo de la idea para dejar de atormentarme o dejarlo en manos de una lectora fiel y escritora maravilla. Si borrara el fic me sentiría horrible y, aunque me quitaría un peso de encima, me da miedo el que por no poder terminar un simple fanfic me sienta incapaz de escribir una novela. Lo segundo, bien, siempre pensé que jannynorthman podría escribir sobre Carlie incluso hasta mejor que yo, Janny es una escritora maravillosa y me alegro mucho de haberla conocido y haber leído su fic de Viviendo al límite y muchas otras cosas suyas, pero ha desaparecido de Potterfics, no ha actualizado nada desde hace un buen de tiempo ni la he leído en algún tweet. La extraño.
Así que creo que no tengo salida, mi fic de Carlie es un compromiso conmigo misma que me da miedo no poder concluir, pero lo estoy intentando y me frustra el no poder. No quiero escribir algo que realmente no tenga ni pies ni cabeza, no quiero echar a perder lo poco que llevo avanzado con ese fic, de casi veinte páginas cada capítulo, escribiendo algo zaparrastroso. Me gustan las tonterías y los disparates, siempre y cuando tengan aunque sea una pizca de sentido común para todos.
Ahora, ya que me he desahogado un poco sobre mi fic de Crepúsculo, quisiera decir que creo que le estoy perdiendo el miedo al botón de "¡Comienza una nueva historia!", es decir, ya en lugar de borrar lo que escribo, lo publico, sin importar si les gusta o no lo que escribo y me critiquen. Menuda idiotez, ¿verdad? Pero estoy harta de las criticas, toda mi vida me han criticado y me da miedo que lo hagan también en un mundo virtual como este. Y, además de ese "avance" conmigo misma, estoy clavándome con un fic de Harry Potter, basado en el libro de las Reliquias de la Muerte, pero insertando un personaje que realmente es muy trillado: la hermana de Harry.
Sí, sí, de verdad que es trillado, pero siempre he querido escribir algo así. Era hermana de Harry o era hermana de Draco, y la preferí como una Potter, pero un poco diferente a como la hacen la mayoría de las personas. O eso creo yo. ¿Quién sabe? Existen muchos fics así y me da una flojera de tamaño descomunal leerlos todos sólo para hacer algo diferente. Lo que es, será. Quizá cuando tenga unos tres o cuatro capítulos ya escritos (porque voy en el segundo pero sigo corrijiendo el primero a veces), empezaré a publicar. O quizá lo termine de escribir, para que no pase lo mismo que con Carlie. Aunque esta vez no me estoy pasando con lo de las veinte páginas del Word en cada capítulo. Ahora apenas hago siete o en veces diez, para no hacer muchas largas, según yo.
Me gustaría dejarles un adelanto de lo que llevo, un pequeño fragmento, y aunque en su mayoría son diálogos es la parte que más me gustó del primer capítulo:

—¿Cómo te sientes, Georgie? —le preguntó Fred.
George, con la mano libre, tanteó el costado de su cabeza.
—Bendecido…
—¿Qué le pasa? —preguntó Fred, aterrado— ¿Su mente se vio afectada?
—Bendecido… —repitió George, abriendo los ojos y mirando fugazmente la mano de Joan sujetando fuerte a la suya— Y como queso…
—¿Ah?
—Como queso… —volvió a repetir— Tengo agujeros, Fred, ¿entiendes?
Ambos sonrieron.
—Todo un mundo de humor sobre orejas… —le dijo Fred— y elijes “como queso”… Das lástima, hermano.
—Pero sigo siendo más guapo que tú —murmuró George en un hilo de voz. Miró alrededor, sonriendo débilmente—. Ahora podrás reconocernos, mamá —la señora Weasley sollozó fuerte, y la mirada de George se volvió hacia Joan—. Hola, Joanie…
Como si de pronto todos recordaran sus pendientes, se giraron a distintas direcciones. Unos se fueron a esperar a Bill, Fleur y Ojoloco al patio y a otros pocos (Hagrid y Ron) el hambre les surgió de repente después de un viaje tan agitado (tomaron algunos bocadillos de la cocina para después esperar a los demás). George se movió un poco, dejando un espacio en el que Joan pudiera sentarse.
—No te deberías de mover… —murmuró Joan, sin saber si sentarse en el espacio o seguir en el piso.
—Ya lo hice, Joanie.
Ella suspiró y se sentó por fin.
—Molly dice que vas a estar bien, pero no puede hacer crecer tu oreja de nuevo…
—Me lo imaginaba.
—… por haber sido magia oscura, y Lupin dice lo mismo.
—¿Ya acomodaste tus cosas por ahí?
Joan sintió como si le echaran agua fría en el rostro.
—Eh... Noqueé a un mortifago con mi mochila en el camino y la perdí —bromeó. George soltó una risotada—. Me alegra no haber traido nada importante.
Hubo un silencio entre ambos hasta que el estómago de Joan rugió. La sangre corrió hasta sus mejillas y miró a George apenada, él sonreía divertido.
—Creo que…
—Ve y arrasa con lo de la nevera por mí —le dijo George.

No sé. Quizá no sea el mejor fanfic que he escrito, pero me gusta y eso es todo lo que necesito para escribir. Especialmente el poner a la hermana de Harry con George Weasley... aunque nada está asegurado, ¿eh? Y decidí llamarla Joan para que sonara un poco como Joanne (Por J. K. Rowling), pero más que nada por Joan Jett, esa maldita cantante de Rock&Roll jodidamente genial que simplemente adoro.
Pues... sin más que decir, por ahora, me despido.
Saludos.

martes, 20 de septiembre de 2011

Sábado 20 de junio de 1942

Tengo varios días sin escribir. Necesitaba reflexionar sobre lo que significa un Diario. Es una sensación singular el saber expresar mis pensamientos, no sólo porque nunca había escrito, sino por que creo que más tarde, ni yo ni nadie se interesaría por las confidencias de una niña de 13 años. Pero en fin, eso no tiene la menor importancia. Tengo ganas de escribir, y aun buscar en mi corazón toda clase de cosas.
"El papel es más paciente que los hombres". Este dicho llegó a mí un día que me encontraba melancólica y muy aburrida, con la cabeza entre mis manos, muy enojada. Es cierto, el papel es más paciente, y como creo que nadie se preocupará por este "Diario", no pienso jamás dejar que alguien lo lea, a menos que encuentre un verdadero amigo o amiga al cual enseñárselo. Aquí estoy, en el punto de partida para comenzar un Diario, yo no tengo amiga.
Para ser más clara, nadie creerá que una muchachita de 13 años esté sola en el mundo. Claro que esto no es exactamente real, ya que tengo a mis padres y a una hermana de 16 años; tengo, en total, más de 30 conocidos, entre ellos las llamadas "amigas". Tengo admiradores en abundancia que me siguen con su mirada, mientras que en la clase, los que no me ven de frente, se ayudan con un pequeño espejo de bolsillo. Tengo una buena familia, con tíos y tías. No. No me falta nada aparentemente, salvo la amiga. Con mis camaradas sólo me divierto. Nunca puedo hablar con ellos de nada serio. Ni siquiera con mis amigas puedo llegar a intimar, he ahí la dificultad. Esta falta de confianza es quizá mi verdadero defecto. De cualquier manera, me encuentro frente a una realidad, y es bastante doloroso no porder ignorarlo.
Esta es la razón de este Diario. A fin de evocar mejor la imagen que me forjo de una amiga muy esperada, no quiero limitarme a simples hechos, como muchos lo hacen, sino deseo que este Diario se convierta en la amiga. Y esta amiga llevará por nombre Kitty.
Kitty no sabe nada de mí. Necesito, pues, de manera breve, contarle la historia de mi vida. Mi padre tenía 36 cuando desposó a mi madre, que tenía 25. Mi hermana Margot nació en 1926, en Francfort del Meno. Yo, el 12 de junio de 1929. Siendo judíos, llegamos a Holanda en 1933, donde mi padre fue nombrado director de la Travies N.V., firma asociada con Kole y Cía. de Amsterdam. El mismo edificio era utilizado por las compañías, de las cuales mi padre era accionista.
Desde luego, la vida no estaba exenta de emoviones para nosotros, pues lo que restaba de nuestra familia se encontraba todavía defendiéndose de las medidas adoptadas por Hitler en contra de los judíos. A raíz de las persecuciones de 1938, los dos hermanos de mi madre huyeron hacia los Estados Unidos, llegando sanos y a salvo. Mi abuela, con 73 años entonces, se nos unió. Después de 1940, nuestra buena racha iba a terminar: primero que nada la guerra, la capitulación y la invasión alemana, lograron llevarnos a la miseria. Disposición tras disposición en contra de los judíos. Los judíos obligados a llevar la estrella, a ceder sus bicicletas. Prohibición para los judíos de salir después de las 8 de la noche, o de permanecer en casa de sus amigos. Prohibido practicar cualquier deporte: no nadar, no jugar tenis o hockey, ni otras cosas de entretenimiento. Prohibido frecuentar a los cristianos. Obligación de asistir exclusivamente a escuelas judías, y muchas otras restricciones semejantes.
De esta manera vivimos, sin hacer esto o aquello. Jopie me dice siempre: "no me atrevo a hacer nada, pues me da miedo que esté prohibido". Nuestra libertad está muy restringida. Sin embargo, la vida es aún llevadera.
Mi abuela murió en enero de 1942. Nadie sabe cómo pienso en ella y cómo la quiero aún.
Estaba en la escuela Montessori desde el jardín de niños, es decir, desde 1934. En sexto grado tuve como maestra a la directora, la Sra. K. Al finalizar el año, fueron despedidas desgarradoras, ambas lloramos. En 1941, mi hermana y yo ingresamos al liceo judío.
Hasta el día de hoy, nuestra pequeña familia de cuatro miembros se encuentra bien, y así llego a este día.

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Simplemente quería publicarlo aquí, adoro a esta niña y este fue el primer libro que leí.

jueves, 25 de agosto de 2011

Don't worry, I'll be okay... someday.

No sé por dónde empezar, qué hacer o cómo reaccionar, qué pensar... no sé nada.
Me siento terriblemente mal, por la escuela, por mi familia, por mi madre, mi hermana, por mí.
No sé qué hacer, no encuentro salida, ni siquiera soy suficientemente valiente para el suicidio, o quizá debería decir "suficientemente estúpida".

Odio estos momentos de impotencia.

No tengo voz, no tengo oídos ni ojos. No tengo sentido del gusto u olor.
No tengo nada.

Escribir hacía que mis sentidos se agudizaran, por medio de la imaginación. Yo sola me entiendo.

No tengo voz porque no puedo hablar. No se me permite.

No tengo oídos a pesar de que me griten que escuche y no oiga. Pero yo no quiero oír ni puedo, mi corazón, mi alma y mi mente me gritan constantemente.

No tengo ojos, y no lo digo porque tengo miope. O tal vez sí. Cada vez estoy más ciega, hay momentos en que todo se me pone negro y después de unos segundos todo regresa a la normalidad, trato de fingir que estoy bien y nada me pasa para que mi madre no me grite, regañe y me obligue a usar anteojos. La cosa es que sólo quiero ver las letras de los libros, nada más.

No tengo sentido del gusto. La comida no me sabe tan bien como antes. Ya no la disfruto a pesar de que "sabe bien".

No tengo olfato, por más que huela una rosa, no la puedo oler. De hecho, muchas veces ni siquiera noto el mal olor de las cosas o lugares, excepto cuando son "pestes nuevas".

No tengo nada. Siento como si me hubieran cortado las manos.

¡Hubiera preferido que me cortaran las manos!

Estoy experimentando tantos sentimientos al mismo tiempo, que parece que ya ni puedo sentir algo.
Me siento... ¿quieres saber cómo me siento? ¡MUERTA!

Pero, ¿saben qué? No importa, no se preocupen, no hay de qué preocuparte. Estaré bien, algún día. Ya verán, todos ustedes, ¡todo el mundo lo verá!

Porque todo es relativo, nada es absoluto, y si no me creen, vayan a la tumba de Albert Einstein o hagan una sesión espirutual y preguntenle a él.

Porque siempre se puede, como dijo "Violet Baudelaire" en "A Series of Unfortunate Events", escrito por Daniel Handler (Lemony Snicket).

Y porque, como todos han dicho alguna vez (y si no, deberían): La esperanza muere al último.

viernes, 8 de julio de 2011

Do not judge, unless you know the story

¿Ves a ese chico corriendo a hacer su tarea en su salón de clases?
Él estuvo al lado de su hermana menor toda la noche durante su ataque de asma.
¿Ves a esa chica con maquillaje por todas partes?
Ella es insegura de cómo se ve y cómo la ven los chicos.
¿Ves a ese chico, con cabello largo y cortes en los brazos?
Él no se corta porque sea emo, sino porque podría haber evitado la muerte de su mamá.
¿Ves a esa chica con la cabeza afeitada?
Ella no está loca. Su mejor amiga tiene cáncer de pecho.
¿Ves a ese chico con moretones en la cara?
Él no perdió una pelea, su papá lo golpea por contestarle.
Y mira a esa chica con ropa barata.
Sus padres fueron despedidos y no han tenido trabajo por unos pocos meses.
Y aquel chico de allá, mordiendose las uñas.
Él está nervioso por una llamada que le dirá si es padre o no.
¿Ves a esa chica en la computadora?
Ella no es antisocial, sólo está escapando del mundo donde la lastiman día a día.
¿Y qué hay del chico que siempre lo ven borracho en las fiestas?
Sus padres murieron, ambos, y nadie se ha detenido a verlo.
Mira a aquella chica, siempre está sonriente y se ríe por todo.
Sí, pero luego va a su casa y se tira a llorar hasta quedar dormida.
Hey, mira a tu mejor amiga, por allá.
Sí, ella es adicta a las drogas. Pero no puedo decirte porque no la entenderías.
¿Ves a esa chica de allá? Siempre trae el telefono a la mano.
No es adicta a los mensajes de texto. Está esperando a oír si encontraron su hermano que fue secuestrado.

NO JUZGUES
A menos que conozcas la historia.

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Hoy cumplo un año en Potterfics.


miércoles, 22 de junio de 2011

Everything's changing, nothing's eternal... make many mistakes

Todo cambia cuando menos cuenta nos damos. El día de ayer estamos coloreando libros infantiles en el jardín de niños, y al poco tiempo ya nos estamos graduando de la universidad... ¡No crean que ando chillona por graduarme de la secundaria! En realidad, tengo miedo, por muchas cosas, pero no voy a hablar de eso y espero que sepan entender.

Hace un momento estaba recordando una canción, títulada "The Call" e interpretada por Regina Spektor; si alguna vez han visto "Las Crónicas de Narnia: El príncipe Caspian", estoy segura de que la han escuchado, es esa canción que suena al final, cuando los Pevensie regresan a su mundo. Por mucho que quisiera hacer toda una reseña sobre esa canción (como por ejemplo, que pareciera estar hablando de toda la saga de libros de C. S. Lewis), me abstendré de hacerlo... aunque quizá un día les explique a que me refiero con lo que está escrito en parentesis. Bueno, mientras mi mente reproducía la canción como si tuviera un iPod en mi cabeza, de repente me acordé de un discurso que me gustaría leyeran, aunque creo que ya lo debieron de haber escuchado antes:

"A los 5 años nos preguntaron qué queríamos ser de mayores, y contestábamos cosas como: Astronauta, presidente… o en mi caso, princesa.
A los 10 volvieron a preguntárnoslo, y dijimos: Estrella de rock, vaquero… o en mi caso, medallista de oro.
Pero ahora que somos mayores, quieren una respuesta seria.
A ver qué os parece esta: ¿Quién cuernos lo sabe?
No es momento de tomar decisiones rápidas, es momento de cometer errores, de subirse al tren equivocado y extraviarse, de enamorarse… a menudo. De licenciarse en Filosofía porque es imposible hacer carrera en ella. De cambiar de idea y de volver a cambiar porque no hay nada permanente…así que cometed todos los errores que podáis, y algún día cuando nos pregunten qué queremos ser, no tendremos que adivinarlo… lo sabremos."

No sé, quizá no tenga mucho sentido que venga y ponga esto acá para que ustedes sólo lo ignoren... anyway, igual ya lo hice y no lo pienso borrar. Sólo me pareció que tenía unas cuantas cosillas que son buenas para reflexionar.

Todo está cambiando, a cada segundo envejeces, mueres, nada es eterno, eres sólo algo temporal que el tiempo se llevará aún en contra de tu voluntad, así que anda... comete muchos errores, porque tratar de ser perfecto es sólo una pérdida de tiempo. Quizá suene "sombrío", pero eso es la cruda realidad, lo quieras o no.

viernes, 15 de abril de 2011

Do not be hypocrite

"En una banca situada en un parque, una chica de no más de dieciocho años de edad se encontraba sentada leyendo felizmente su libro favorito, 'Romeo y Julieta', hasta que un chico de su misma edad se acerca y comienza a hablarle:

-Hey, tú, sí, tú, te estoy hablando, mírame... Así está mejor, dime, ¿tú crees en Dios?
-¿Yo? ¡JÁ! Por supuesto que no, ¿cómo voy a creer en un tipo que nunca se ha dejado ver?
-Ah, genial, y entonces, ¿crees en el amor?
-Claro que lo hago, ¿por qué no habría de hacerlo?
-Oh, bien, toma, tengo esto para tí.

El chico se acerca, le deja en la mano el presente que traía consigo y se marcha sin mirar atrás. La chica observa, curiosa, el objeto que depositó en su mano y cuando está por preguntar a qué se debía aquello, se da cuenta de que el chico ya se había ido."

Si nadie nunca ha visto a Dios, ¿para qué creer en él? Si no lo puedes ver, ¿cómo sabes que existe?
Pues igual pasa con el amor, si no lo ves, ¿para qué creer en el amor entonces?


No porque no puedas ver algo significa que no existe. Si no puedes creer en Dios por no poder verlo, ¿cómo puedes creer entonces en el amor?

Si bien dicen que Dios es amor, y tú crees en el amor, ¿qué otra prueba quieres de que él existe?

Piensa dos veces antes de decir si crees en Dios o en el amor, no creo que quieras ser: "El hipócrita número uno".

domingo, 3 de abril de 2011

There's something in write that makes me feel... very happy

Existe una extraña sensación que me llena mientras escribo. Es algo que hace que mis mejillas se endurezcan suavemente y estiren mis labios en una sonrisa. Algo hermoso.
Algo que siento cada vez que escribo... desestrés, quizá, pero no, es algo diferente a eso... es algo extraño que al principio no sabía qué era; no tenía ni la más mínima idea.
Es Felicidad.
Sin duda.

Hay algo en escribir que me hace sentir... muy feliz.

domingo, 20 de marzo de 2011

Siempre a tu lado, Hachiko.

Buenas... noches, a todos.
Se preguntarán: "¿Qué hacía esta chica publicando una entrada en su blog a media noche?", pues dejen les explico... Hace apenas unos minutos he terminado de ver una película de las películas más hermosas que pueden existir:

Siempre a tu lado, Hachiko.

Quizá ustedes ya hayan visto la película, quizá no... si no la han visto, les puedo asegurar de que cuando lo hagan van a llorar. Yo lo hice.

La película se trata de un perro de raza Akita (o Akita Inu), es basada en una historia real, vivida en Japón.
Aquí una foto de un perro de raza Akita:
Según la película, éste hermoso animal es encontrado de cachorro por el Profesor Parker en una estación del tren por la noche, vagando. El hombre queda cautivado por el animal y decide llevarlo a casa, donde su esposa no se muestra muy positiva respecto a tener un perro en casa, por lo que el profesor le explica que sólo será un tiempo hasta que alguien reclame al animal. A la mañana siguiente, sin más remedio, Parker se lleva al cachorro a su trabajo, donde un amigo, Ken, traduce un símbolo que tiene el collar del perro como 'Hachi', y es así como Parker decide nombrar al cachorro.
Un dia Parker intenta entrenar a Hachi para que éste fuera por la pelota, como cualquier otro perro, pero el perro se niega rotundamente. Aún así el hombre no se rinde e incluso le muestra cómo debe de ir por la pelota (arrojándola y llendo él por ésta), su hija los espía por la ventana y ríe divertida, notando cómo en tan poco tiempo un lazo ha unido a su padre con el animal. Cate (esposa del profesor) se da cuenta de esto, y por esa razón cuando alguien llama a su casa, interesado en el cachorro, élla le dice que Hachi ya tiene dueño.
Los años pasan y Hachi y su dueño han formado una amistad inquebrantable, aunque el profesor aún no logra entender por qué el perro se niega a jugar con él como cualquier perro normal. Se lo comenta Ken y éste le dice "Él no es cualquier perro, sólo iría por la pelota si hubiera una razón especial" a lo que Parker le contesta "Encontraré esa razón".
Una mañana el profesor se marcha al trabajo y Hachi le sigue hasta la estación, Parker intenta hacer que el perro vuelva a casa, sin éxito, por lo que se va a casa junto a su perro y hace hasta más tarde el trabajo. Esa misma tarde, Hachi intuye la llegada de su dueño y vuelve a la estación desde donde le espera. Parker se sorprende bastante, y decide que su mejor amigo le acompañe a la estación del tren cada mañana. Y así ocurrió todos los días, hasta que un día Hachi se niega a acompañarlo por más que su dueño le insiste. Al ver que el perro sigue negándose, decide irse sin él.

Bueno... aquí es donde comienza la parte más triste de la historia, y no creo querer llorar nuevamente por la misma razón.

Esta es de las películas más hermosas que he visto, donde la lealtad y el amor son lo principal.
Les dejo una fotografía del verdadero Hachiko, en una edad ya avanzada.


Éste hermoso animal nació en Odate, en 1923, y tras la muerte de su dueño, en 1925, él continuaba volviendo a la estación de Shibuya. Esperó a su dueño día tras día. Hasta que falleció, en 1934.

Existe una estatua dirigida a Hachiko, fuera de la estación en la que esperó durante diez años, cada día, al Dr. Hidesaburo Ueno.

viernes, 11 de marzo de 2011

That my smile not fool you... I am torn inside.

"Que mi sonrisa no te engañe... 
estoy destrozada por dentro."




"Las lágrimas más dolorosas, son las que derrama el alma. En silencio, sin temor a ser descubiertas. Ocultas tras una máscara sonriente."

Recuerdo el día en que dije eso como si hubiese sido ayer. Aunque en realidad fue hace alrededor de cinco años.

Lo dije, una semana después de cuando él se fue.

miércoles, 2 de marzo de 2011

Can we pretend that airplanes, in the night sky, are like shooting stars?

I could really use a wish right now, wish right now, wish right now. Can we pretend that airplanes, in the night sky, are like shooting stars?

Sí, yo también quiero fingir eso, quiero delirar por un mínimo momento y pedirle cientos de deseos a las estrellas que estoy segura que jamás se van a cumplir.

Esto es algo que de verdad me jode.

El sentimiento de "nunca lo lograrás" o "no puedes" a veces me llena el alma y me jode no poder hacerlo a un lado. Claro, yo que puedo, pero me da miedo que al intentarlo no lo pueda hacer. Me da miedo pensar en el futuro... no, me corrijo:

Me da miedo el futuro.

Es tan sólo en pensar qué va a pasar y siento cómo el miedo me invade, me aterra. No lo digo en voz alta, nunca, o al menos creo que lo he dicho un par de veces, pero es sólo para liberar un poco de ese pánico en mi interior y tratar de sentirme más aliviada.

Es ahí cuando me pongo a pensar: "Quisiera que las estrellas cumplieran deseos", siempre es ahí. Nunca están de más los deseos, y sé muy bien que los deseos se cumplen, pero sólo si luchas por ellos... Bien, ¿qué tal si deseas algo que, por más que luches, nunca lo puedas tener?
Uf... no creo que me entienden, no soy buena explicando.

Y como sea, conozco eso de "las estrellas fugaces pueden volver tus deseos realidad", y a veces me quedo pensando "¿Por qué sólo ellas?", pero si eso fuera verdad, entonces le he pedido deseos a las estrellas equivocadas. Aunque...
Yo nunca he visto una estrella fugaz :(