El otro día me peleé con mi pareja. Mi mamá intentó mediar porque fue algo serio.
Fue algo tan serio que se me olvidó que pedirle ayuda a mi mamá no me servía.
Mi novio se fue, al final dijo: "no vaya a ser que me quede sin novia y sin trabajo".
Y mi mamá me dijo:
Ya no sufras. Ya sufriste mucho de chiquita, no sufras ahora de grande.
Y se me acabaron las lágrimas y los temblores.